La rapidez del embarque. Nada de problemas por el equipaje de mano. La amplitud del asiento. La puntualidad
El vuelo se inició en Atenas, a la madrugada, la persona de la empresa que realizó el embarque muy mal educada, gritándole a todo el mundo, sin organizar los grupos, etc. Adicionalmente nos hizo facturar dos carry-on que estaban en correctas condiciones para viajar en cabina. De hecho habíamos viajado con Rayanair, Transavía y otros con el mismo equipaje sin inconvenientes. Finalmente ese equipaje no llegó a destino y fue recuperado varios días después. Adicionalmente el personal de cabina poco amable también.
Es el peor vuelo que he cogido en mi vida. Horas de retraso, mal olor, sin cena, incómodo, etc
Muy malo confor asiento estrecho y cortos mala comida poco selección de bebidas
Considero que si se debe ofrecer algo con el segundo servicio..no solo café y té sino algo suave para comer...unas galletas o un pan podría ser...
Un calor tremendo, todos vestidos con ropa de invierno lo hizo más complicado y aún así no nos dieron ni un vaso de agua. Tanto así, que una muchacha tuvo un desmayo. Eso, además, hizo que saliéramos tarde para tomar las conexiones de cada uno. No había pantallas para el entretenimiento, no hubo entretenimiento.
No dan auriculares/audífonos, hay que comprarlos a 3 euros, y no sirven desayuno. La cena sí estuvo muy rica y el resto del vuelo muy bien
Las sobre cargos realmente displicentes y baja actitud de servicio
No pude viajar porque me cambiaron de horario ya solicité una devolución de la cual no tengo retorno aún
No se cual sería la política de la comida con respecto a la duración del vuelo. Para una duración de nueve horas sirvieron una comida y el resto tenias que pagar. Los audífonos también tenias que comprarlos y no tenian mucha variedad de películas. Del resto resto bien, viajas tranquilo.